giovedì, luglio 27, 2017

Donde las lechugas huelen a topacio

Poesie di geneki

Ti scrivo tutte queste poesie
E altre ancora che non conosco
E le conto per te come vortici
Come sigilli di fuochi e singhiozzi
Ti scrivo tutte queste poesie dal passato
Dal confine
Te le scrivo con questo volto
Con nessun altro
Con questo sorriso dal fondo dello specchio
Con gli occhi sommersi nello stagno
Con gli occhi bendati
Ti scrivo queste poesie piú in lá del cuore
Ti suono queste poesie come tamburi
E tuonano davvero
Come crotali si scuotono
Come fiumi sferzati dalla pioggia
Ti scrivo queste poesie
Come potrebbe scriverle un albero
Sule sue foglie
Perché l’autunno se ne diletti
Te le scrivo sulle mie unghie
Perché crescano oltre la mia morte
Queste poesie sono i miei funghi.
Avvelenano la morte.

*

Te escribo estas poesías
Y otras más que ignoro
Y las cuento como remolinos
Como sellos de fuegos y sollozos
Te escribo estas poesías desde el pasado
Desde el dintel
Te las escribo con esta misma cara
Con ninguna otra
Con esta sonrisa desde el pozo en el espejo
Con los ojos ahogados en la charca
Con los ojos tapados
Te escribo estas poesías desde más allá del corazón
Como tambores te toco estas poesías
Y truenan de verdad
Se sacuden como crótalos
Como ríos azotados por la lluvia
Te escribo estas poesías
Como un árbol la podría escribir en sus hojas
Para que el otoño las disfrute
Las escribo en mis uñas
Para que sigan creciendo después de mi muerte
Son mis setas
Para envenenar a la muerte.


*

Uccelli volano tra le gabbie
Intercettano parole lucciole
Il tuo sorriso li anima e li rivela
Come proiettili che crivellano il cielo
Ti vedo, appari con gli attributi del tuo potere
La spiga, le cocinelle, l’aspide e la ruota
L’olio santo
L’arcano magistrale
La trama del vulcano
Il filtro lo spumante
Il tuo sorriso sparisce
Velato dal battito delle ali
Le gabbie volano lontano
Le gabbie sono lanterne
Candele-occhi-di-rana
La luna verde ancora non è sorta
Venera illumina le colline
Con la sua calma candida
Anima di gelo


*


Pájaros vuelan entre las jaulas
Interceptan palabras-luciernagas
Tu sonrisa les da vida y las revela
Como proyectiles que acribillan el cielo.
Te veo apareces con los atributo de tu poder:
La mazorca la mariquita, el áspide, la rueda
El aceite consagrado
El arcano magistral
La trama del Volcán
El filtro del champán
Tu sonrisa se desvanece
Velada por el gran aleteo
Las jaula se alejan
Velas-ojo-de-rama
La luna verde aún no surge
Venus barre las colinas
Con su cándido sosiego
Alma del hielo.

*

La foresta minaccia le campane
Le ghirlande risuonano dalle stelle alla gloria
La breccia si sfarina
In voli di falene tetre
I tuoi occhi sono bianchi
Come il latte delle stalattiti
Lasciami alla mia sete
Come corolla del tuo capezzolo
Sono vinto dai lupi
Dalla loro danza felpata
La croce del campanile
Orienta la mia ostinazione.

*

La foresta amenaza las campanas
Las guirnaldas suenan desde las estrellas hasta la gloria
La hendidura se pulveriza
En vuelos de polillas sombrías
Son blancos tus ojos
Como la leche de las estalactitas
Déjame mi sed
Como corola de tu pezón
Me han vencido los lobos
Y su danza sosegada
La cruz del campanario
Orienta mi obstinación

*



  
Mélisande

La tua voce era come una torre ferita
Il sole creava ombre nelle tue pupille
Come in un vecchio bosco
In fondo a un pozzo
La campanella della tua voce palpitava
Come il cuore di un fringuello
E il filo dei suoi rintocchi minacciava
Di spezzarsi ad ogni alba
La tua voce era quello che mi mancava di te
Gli insetti, le corse sul greto, la sapienza
Delle tue paure
Non potevo piú fissarti nel ricordo
Solo la tua voce perdurava
La tiravo fuori dal suo scrigno
Come un pugnale dal cuore di un’adultera bruna
La tua voce era rosa di novembre
Addormentata nella nebbia
Non avrei sopportato di reciderla
Con le cesoie delle mie ciglia


*

Melisanda

Tu voz era una torre herida
El sol criaba sombras
Dentro de tus pupilas
Como en un bosque antiguo
En el fondo del pozo
La campanilla de tu voz latía
Como el corazón de un jilguero
El hilo de sus redobles amenazaba de quebrarse
Con el alba
Lo que me quedaba de ti era tu voz
Insectos, carreras al lado del río
La sabiduría de tus miedos
No podía más guardarlos en la mente
Sólo tu voz persistía
La sacabas de su estuche
Como un puñal del corazón
De una adultera morena
Tu voz mi rosa de noviembre
Adormilada en la niebla
Nunca hubiera podido cortarla
Con las tijeras de mis cejas.



*



Le figlie della montagna

Le figlie della montagna
Cullavano gli ororlogi
Sui pascoli della tristezza
Avevano occhi grigi e capelli d’arminio
Lunghe catene d’oro
Le destinavano per sempre ai capricci delle nuvole
In fondo al mio cassetto
Si aprivano  altre contee
Ma il tempo mi attraversava
Come il vento nel canneto
Ero un mulinello di cenere
Stregato dal tombino
I miei occhi come pozzanghere
Dove scoppiavano le bolle evocate dalla pioggia
La cenere mi attraversav non mi ricordo del fuoco
La mia cenere è il tempo
Il tempo è una finestra
La scavalco con un balzo
E resto nella mia stanza.




*

Las hijas de la montaña

Las hijas de la montaña
Mecían los relojes
En pastos de tristeza
Sus ojos eran grises su pelo púrpura
Largas cadenas de oro
Las ataban a los caprichos de las nubes
En mi cajón
Se despertaban otras comarcas
Pero el tiempo me traspasaba
Como viento en el cañaveral
Era un molinillo de cenizas
Hechizado por la alcantarilla
Mis ojos dos charcas
Donde estallaban las burbujas evocadas por la lluvia
La ceniza me atravesaba no me acuerdo del fuego
Mi ceniza es el tiempo
El tiempo es una ventana
Con un salto la atravieso
Para recaer en mi cuarto.

*





Tu alma

Tu alma es el vidrio detrás del cual veo la fiesta de las sábanas angelicales
Tu alma es el fuego que consume el romero soñador de invierno
Tu alma es el río que bendice las algas celestes
Tu alma es el viento que sopla desde las botellas del los antiguos misterios
Tu alma flor de sauce que emborracha la niebla
Que ríe traviesa al afán de los días
Tú alma que sube al monte de nácar con mil deseos a la espalda
Tu alma camelo enamorado de la nieve
Tu alma flecha que atraviesa el espejo mientras un chorro de noche atraca el eucalipto
Tu alma perfume amargo de la subida al monte de adviento
Tu alma hogar del trigo y de los pájaros
Tu alma mi iris en el estuche de terciopelo
Tu alma  es el zorro que salta de la hoguera a la luna
Tu alma es el barro de mi costilla perdida
La guitarra de mis notas raptada por las gacelas
Tu alma es mi café de la mañana cuando la última estrella asume el color del anís
Tu alma es el trigo de mi olvido
La trepadora de mi memoria
Tu alma es mi cuerpo y el tuyo cubiertos de arena blanca.


*

Tu casa

Tu casa es luminosa como un enjambre de abejas en la morera de noviembre
Donde se sellan los pactos entre los Ángeles y los lobos
Tu casa es amapola y trigo al despojarse las praderas
Tu casa donde un pájaro más otro pájaro suben suben las escaleras azules hasta el tablero de los grillos
Donde las lechuga huelen a topacio
Donde sentarse en sillones de musgo al amanecer de los ciervos
Tu casa hogar verdadero de las lunas amargas
Tu casa barridas por las colas suaves de las manadas de zorros
Tu casa entre el tomillo y el alquitrán
Luz de velas y vino
Zarpa en el río entre tambores y oriflamas
Tu casa ignorada por los rebaños de unicornios
Tu casa donde se entra con una llave de hielo.

*

Cuando tú naciste la esfera de bronce
Se desplomó sobre el alarido de las cebras
Los leopardos se confundieron con las abejas
Zumbando al rededor de las flores-gacelas
Y todo un bosque blanco surgió del musgo y de las perlas
La niña de mis ojos rozó mis párpados
Como la hoja de las palmeras la redondez de la lluvia
Tu pies pisaron triunfantes trigo y uvas
Al amanecer de la mirada

*

Non eri forse tu che correvi su un prato di sistri?
Preceduta da un gregge di pavoni?
I corvi erano il tuo parasole
Le radiazioni la tua preghiera
Le tue scarpette di raso tra cicoria e zucchini
Lasciavano orme leggere
Tracciavano i passi della danza del gallo silvestre
Poi i tamburi della grandine si abbatterono
Sulle foglie immense del fico
Il latte inacidí
Dall’euforbia al prezzemolo
I tuoi seni come cerbiatti
Si nascondevano tra i carpini
Erano coppe le tue ascelle
Per le api del canto
Le cucitrici cavalcavano tigri
Ciascuna con una forbice di speranza
L’anima si svuotava come una clessidra
Nell’attesa di essere capovolta.


*

¿Eras tú acaso corriendo en una pradera de sistros?
Precedida por el rebaño de loa pavos reales
Los cuervos eran tu parasol
Las radiaciones tú oración
Tus zapatillas de terciopelo entre la endivia y los calabacines
Dejaban huellas ligeras
Trazaban los pasos de la danza del gallo montés
Luego los tambores del granizo se abatieron
Sobre las inmensas hojas de las higueras
La leche cuajó desde la euforbia hasta el perejil
Tus senos cervatillos escondidos en la maleza
Eran copas tus axilas para las abejas del canto
Las costureras cabalgaban tigres
Cada una con su tijera de esperanza
El alma se vaciaba como un reloj de arena
Esperando que le dieran la vuelta.


*


Era un angelo composto di battaglie
Proprio come i colombi
Sono coalizioni di timo e di origano
La sua ombra era la tentazione dei Cherubini
All’ora dell’accensione dei ceri zenitali
E un muro per appoggiare la fronte
Per lenire il fuoco dello sguardo
Il dolore di chi contempla negli angeli
L’avventura della sua famiglia.


*

Era un ángel compuesto de batallas
Así como las palomas son coaliciones de tomillo y orégano
Su sombra era la tentación de los Querubines
Cuando se encendían los cirios cenitales
Y un muro para apoyar la frente
Para aliviar el fuego de la mirada
El dolor de quien contempla en los ángeles
La aventura de su familia.

*

L’estinzione dei francobolli era verde e azzurra
Come tanti volti del passato
Una bicicletta rossa davanti al tabaccaio
Le teste nei caschi
I capelli biondi come tentacoli
Che cercavano di coinvolgere anche le stelle
Nello stile dei titoli di giornale
Che macchiavano le dita allora
In fondo a quel pozzo
Le caramelle di liquirizia chiamata cappelli da prete
Le libellule sullo stagno dei cardi
Le nuvole basse del terremoto
Il cuore di mile anni custodito dalla marna
Come pegno d’amore proprio nell’istante della fioritura del biancospino
Le tue dita che spezzavano i grissini senza disperdere nemmeno una monetina
Cosí la memoria in una busta volava in un cesto di vimini
Verso il presidio degli ultimi frassini

*

La extinción de  los sellos era verde y azul
Como muchas de las caras del pasado
La bicicleta roja delante del estanco
Las cabezas en los cascos
O tentáculos rubios mal peinados
Que intentaban agarrar las estrellas
En el estilo de los títulos de los periódicos
Que entonces manchaban los dedos de plomo
En el pozo caramelos de licoricia llamados gorros de curas
Las libélulas en las charcas de los cardos
La nubes bajas del terremoto
El corazón-de-los mil-años preservado por las marnas
Como prenda de amor en el instante en que florecía el blancoespino
Tus dedos rompiendo los grisines sin dejar caer ni un céntimo
Así la memoria en un sobre volaba en una cesta de mimbre
Hacia el presidio de los últimos fresnos.

*



Doveva solo alzare la mano destra
Perché crepitasse la collezione di tutti i suoi delitti
Le tecle piene di transitors e conchiglie
Le onde distese sul porfido della piazza
Quando le statue di bronzo degli dei erano madide di sudore
E le fisarmoniche farfugliavano come vecchi fumatori di nazionli esportazione
E le nuvole?
Dove trovare allora la forza di sollevare lo sguardo alle nuvole?
Feconde di abiezione erano le nuvole
 Come vascelli implumi in balia del vento
Che dissipava l’antimonio tipografico
Tra i tavoli del caffé Egypte
E le anemoni del bosco.

*

Sólo tenía que levantar la mano derecha
Para oír crepitar la colección completa de sus crímenes
Las teclas llenas de transistores y caracoles
Las olas tendidas sobre las losas de la plaza
Cuando hasta las estatuas de bronce de los dioses eran empapadas en sudor
Y los acordeones tartamudeaban como viejos fumadores de ducados
¿Y las nubes?
¿Donde encontrar la fuerza para levantar la mirada hacia las nubes?
Fértiles de infamias eran las nubes
Como barcos sin plumas dominados por el viento
Que esparcía antimonio tipográfico
Entre las mesa del café Egypte
Y las anémonas del bosque.

.
*

I tuoi piedi

I tuoi piedi oasi nel deserto della mia vicinanza
I tuoi piedi colline di colombe vespertine
I tuoi piedi dallo scheletro di corallo
I tuoi piedi sccogli dove naufraga la nostalgia
I tuoi piedi volti sconociuti che mi sforzo di non dimenticare
I tuoi piedi ciottoli levigati di un giardino zen
I tuoi piedi che incespicano sul sentiero
I tuoi piedi profumo del pane nelle cittá della pianura
I tuoi piedi bulbi di giglio delle dune
I tuoi piedi piume di aquila bianca appollaiata su un albero di zinco
I tuoi piedi nei sandali di papiro
I tuoi piedi di litio e incenso sulla soglia
I tuoi pieddi accanto a un’arancia perfettamente sferica
I tuoi piedi ad Alicante
I tuoi piedi nei gambaletti neri
I tuoi piedi accarezzati dal muschio
I tuoi piedi che dormono nella posizione del loto
I tuoi piedi di quarto di luna di dicembre
I tuoi piedi perfetti come pinoli e ghiande.


*






Tus pies

Tus pies en el desierto de mi cercanía
Tus pies colinas de palomas vespertinas
Tus pies con el esqueleto de coral
Tus pies arrecifes donde naufraga la nostalgia
Tus pies rostros desconocidos que me esfuerzo de no olvidar
Tus pies guijarros pulidos de un jardín zen
Tus pies que tropiezan en el sendero
Tus pies perfume del pan en las ciudades de la llanura
Tus pies de lirio y dunas
Tus pies de águila blanca acuccurada en un árbol de zinc
Tus pie en las sandalia de papiro
Tus pies de litio e incienso en el dintel
Tus pies cerca de una naranja que es una esfera perfecta
Tus pies con las medias negras
Tus pies acariciados por el musgo
Tus pies dormidos en la postura del loto
Tus pies de cuarto de luna de diciembre
Tus pies perfectos como los piñones y las bellotas

*




Un’isola

Un’isola seme germogliato in solchi salini
Nell’onda dell’abbraccio del sole ubriaco
Un’isola remota dalla soliditá dell’avarizia
Un’isola irta di chiodi di cobalto
Un’isola come una nuvola tra la fantasia e la paura
Un’isola spettinata
Distesa su una vecchia coperta
Un’isola come un’ascesa
Un’isola pupilla d’occhio infermo
Un’isola specchio di ricordi e di cocci
Un’isola con tavolini di zinco e margherite
Un’isola
di gru abbandonaea dalle imprese di costruzione
Che l’inverno trasformerá in cigni pronti a volare a Cipango
Un’isola disprezzata dai re
Un’isola con una cresta d’oro e l’altra di corallo.
Un’isola gallo dagli speroni cromati
Un’isola che nitrisce
Un’isola coperta di rugiada
Come il corredo di una sposa lebbrosa
Un’isola screziata come il manto di nozze di una principessa sterile
Unisola di rane dove si vive per sempre
Un’isola ammobigliata con incudini e piume
Un’isola soffice di cipria
Un’sola di iride rubate a fanciulle sedotte
Un’sola senza pioggiia
Un’isola incatenata a una nuvola porpora
Un’isola dove ruzzolano i ciottoli del vento
Un’isola caduta dal borsellino di un Re durante la crociera del suo giubileo
Un’isola nella mia mente e un’altra nel mio cuore
Un’sola d’odio e l’altra d’amore.


*

Una Isla

Una isla como semilla germinada en surcos salados
En la ola del abrazo del sol borracho
Una isla alejada de la solidez de la avaricia
Una isla acribillada por clavos de cobalto
Una isla como una nube entre fantasia y miedo
Una isla despeinada
Tendida sobre una vieja manta
Una isla como una subida
Una isla pupila de ojo enfermo
Una isla espejo de recuerdos y cacharros
Una isla con mesitas de zinc y margaritas
Una isla
De gruas abandonadas por las empresas de construcción
Que en el invierno se volverán cisnes listos para volar a Cipango
Una isla menospreciada por los reyes
Una isla con una cresta de oro y la otra de coral
Una isla gallo de espolones cromados
Una isla que relincha
Una isla cubierta de rocío
Como el ajuar de una novia leprosa
Una isla moteada  como el manto de una princesa estéril
Una isla de ranas donde se vive siempre
Una isla amueblada con yunques y plumas
Una isla blanda de talco y otros polvos cosméticos
Una isla de iris robadas a jovencitas seducidas
Una isla sin lluvia
Una isla encadenada a una nube purpurea
Una isla donde rodean los guijarros del viento
Una isla caída del monedero de un Reyen el crucero de su jubileo
Una isla en mi mente otra en mi corazón
Una isla de odio la otra de amor.

*


Era il corvo che custodiva le uova del mio sogno
Era il corvo che le covava
Che le liberava perché come il fumo si alzassero verso la notte
Era il corvo che tesseva il sogno
Che lo impastava per infornare il pane di questa e di altre notti
Che ne traeva una pastiglia di dolore
Era il corvo che volava intorno al sogno
Intorno alle tu pupille verdi come la sete che non sapevo estinguere,
Le tue pupille dentro il mio sogno
Le tue pupille verdi dentro l’uovo
Le tue pupille verdi che covano l’occhio del sogno
Le tue pupille verdi che fioriscono
Le tue pupille verdi di polline di muschio
Verdi screziate
Sul fondo del torrente
Le tue pupille verdi tra la schiuma
Tra le rime dei mulinelli di cristallo
Le tue pupille verdi
Il corvo le custodisce
Il corvo del mio sogno
Nel cuore del suo uovo nel cuore del sonno.


*

Era el cuervo el guardián de los huevos de mi sueño
Era el cuervo que empollaba
Que liberaba los huevos para que como el humo se levantaran hacia la noche
Era el cuervo tejedor del sueño
Que lo amasaba para hornear el pan de sta y otras noches
Que sacaba una pastilla de pena
Era el cuervo que volaba alrededor del sueño
Alrededor de tu iris verde como la sed que no sabía extinguir
Tus pupilas en mi sueño
Tu pupila verde en el huevo
Tu pupila verde empollando el ojo del sueño
Tu pupila verde floreciendo
Tu pupila verde de polen de musgo
Tu pupila verde verde moteada
En el fondo de la rambla
Tu pupila verde entre la espuma
Entre las rimas de torbellinos de cristal
Tu pupila verde protegida por el cuervo
Por el cuervo de mi sueño
En el corazón del huevo
En el corazón del sueño.


*

Magrissiima, verde

Quando ti svegliavi
Si diramava in vapore il tuo dolore
Svaniva da te l’abito del domani
Il furto che impone la stanchezza
Quando ti sveglliavi eri sconfitta
Magrissima
Verde
Retta come un alibi vergognoso
Quando ti svegliavi
I tuoii singhiozzi ti abbandovano
Come una cucciolata di lupo color rame
In un bosco dorato da una pioggia orizzontale
Quando ti svegliavi non eri un angelo
Scuotevi svogliata i mozziconi spenti della tua paura
Quando ti svegliavi speravi che finisse di essere albero il dolore
La vita di essere corolla
Il tutto avvolto da un distinto abbaglio.





*

Flaca y verde


Cuando te despertabas
Se ramificaba tu dolor como aliento
Desvanecida de ti la costumbre de mañana
El hurto que impone el cansancio
Cuando te despertabas eras vencida
Flaca
Verde
Recta como una coartada vergonzosa
Cuando  te despertabas
Tus sollozos te abandonaban
Como una camada de lobos color de cobre
En un bosque dorado por una lluvia horizontal
Cuando te despertabas no eras un ángel
Sacudías sin gana los muñones apagados de tu miedo
Cuando te despertabas esperabas por fin que el dolor dejara de ser árbol
La vida de ser corolas
Y todo envuelto en diferente deslumbre.


*

La vasca da bagno di zinco


Era un altro angolo di terra
Con il suo fiume il pendio le felci irrorate di gas nervino
Le palanche cambiate sul mercato
Con sacchetti di chiocciole bianche
La madre cullava la profetessa alla frontiera della luna
Ed era una pioggia di latte
Che lavava le ombre dei faggi
In un angolo del Maso quello piú scuro
Danzavano i gufi il loro minuetto
La vasca da bagno di zinco
Profumava come una matitina di primavera sul lungomare
I tuoi occhi erano un palmizio plaudente
Nel vento che mulinava tra i ricordi
Nell’armadio degli orologi si spezzava il filo della contraddizione
Un sospiro profondo sarebbe bastato a garantirne la coerenza?
Aprivi la veste bianca e la stufa si alimentava del tuo profumo
I tuoi singhiozzi erano cristalli
Tra le teiere e i dolci di eucalipto.


*

La bañera de zinc


Era otro rincón de tierra
Con su río su pendiente, los helechos fumigados con gas nervino
Las “palancas” cambiadas” en el mercado
Con saquitos de caracoles blancos
La madre que acunaba a la profetisa en el dintel de la luna
Y había una lluvia de leche
Para lavar la sombra de las hayas
En un rincón del cortijo más oscuro
Los búhos bailando su minuete
La bañera de zinc
Perfumada como una mañana de primavera al lado del mar
Tus ojos eran un palmeral de aplausos
En el remolino de recuerdos del viento
En el armario de los relojes se rompí el hilo de la contradicción
¿Un profundo suspiro hubiera sidio suficiente para garantizar su coherencia?
Abrías tu traje blanco y se alimentaba de tu perfue
Tus sollozos eran cristales
Entre las teteras y los buñuelos de eucalipto.


*



Perforatrice di ghiaccio

La poesia perfora il ghiaccio
Strato dopo strato giú verso il passato
Dalle parole congelate alla vita cristallizata
Pone mine per parlare alla luce
Agli angeli della fioritura
Alla malvagitá dei ragni e dei rannuncoli
Alle minute creature perfette che la attendono e la accolgono
Gli orologi leali all’appello
Il mantello del tempo
La liturgia maestosa che celebrano le stagioni
L’odore delle castagne bollite nel loro latte
Schegge di passato si separano con uno schianto
Frammenti di sillaba, schiocchi di lingua, risucchi, sibili, sputi
Sul pavimento della cattedrale di ghiaccio
Il vescovo dorme sul suo trono d’ebano
Il pastorale come una lancia perfora il petto della luna
Il Crocifisso plana tra le navate
Falco mesto in cerca di piccole prede
Nella cattedrale di ghiaccio
L’Agnello nel rosone ha cessato di sanguinare
- Non sum dignus -
La poesia perfora il ghiaccio fino alla contrada della forfora
Fino alle zecche, alla solitudine
Dell’affamata nuda e madida con l’acne
Della rossa dai denti marci nella cabina del telefono davanti alla caserma
Fino ai portici inondati di desideri oesceni
Di miracoli quotidiani di miseria
La poesia puó giungere anche quaggiú
Dove il sole èuna palla di neve
Dove inciampo nella mia sciarpa troppo lunga che ha il colore dell’oro e del fuoco
Proprio nel fondo laggiú sotto coltri e strati di ghiaccio
Avanza la processione delle prostitute nubiane
La confraternita delle smarrite di Axum
Con le pesanti tuniche di piombo petulanti campanelle di vetro ai polsi alle cavigllie
Mentre l’attica corriera si inabissa proprio davanti al molo
Quando ancora non tremola nella luce arancione la stella dei pastori
E tutto resta sepolto dal ghiaccio sotto strati e coltri di ghiacco
Che solo la poesia puó perforare dissipando fredde schegge taglienti di sapienza.


La poesia perfora el hielo


La poesía perfora el hielo
Capa a capa hacia el pasado
De las palabras heladas a la vida cristalizada
Hace estallar minas par hablar con la luz
Con los ángeles de la floración
Con la maldad de las arañas y de la jara
Con las minúsculas criaturas perfectas que la esperan y a acogen
Los relojes leales a la llamada
La capa del tiempo
La liturgia majestuosa celebrada por las estacione
El perfume de las castañas hervidas en su leche
Fragmentos de pasado se separan con un golpe seco
Fragmentos de sílabas, chasquidos de lenguas, succiones, silbidos, salivación
En el suelo de la Catedral de hielo
Duerme solitario el obispo en su trono de ébano
Su cayado como lanza perfora el pecho de la luna
El crucifijo plana entra las columnas de las naves
Halcón mustio en busca de pequeñas presas
El la catedral de hielo
El cordero del rosetón ya no sangra más
- Non sum dignus -
La poesía perfora el hielo hasta la comarca de la caspa
Hasta las garrapatas de la soledad
De la hambrienta desnuda comida por el acné
De la roja de dientes prohibidos en la cabina telefónica delante del cuartel
Hasta los pórticos poblados de deseos obscenos
Milagros cotidianos de la miseria
La poesía puede llegar hasta aquí al fondo
Donde el sol es una bola de nieve
Donde tropiezo en mi bufanda demasiado larga del color del trigo y del fuego
Hasta el fondo baja capas y capas de hielo
Avanza la procesión de las rameras nubianas
La cofradía de las lisiadas de Axum
Con las pesadas túnicas de plomo petulantes campanillas de vidrio a la muñecas y a los tobillos
Mientras el ático tranvía naufraga delante del espigón
Cuando aún no tiembla la luz anaranjada de la estrella de los pastores
Y todo queda sepultado en el hielo bajo capas y capas de hielo
Que sólo la poesía puede desperdigar fragmentando capas y capas de afilada sabiduría.


*

Stinco d’asino con lampada azzurra

Seduto al tavolo del ristorante
Convoco tutto il mio dolore
Dal corvo alla zecca dal sale al salnitro
Dal cinque di picche
Alla dama abbandonata dall’ermellino
Dal treno ferito tra la neve alle lune runiche delle tue unghie
Oh malía!
Bestia attonita alla benedizione dello sputo
Clemente candelabro a sette braccia dell’anestesia compassionevole
Seduto al tavolo del del ristorante
Conosco quello che resta del mio dolore
Tra lo stinco d’asino e la lampada azzurra
Tra l’anice e i festoni della calendula
Tra lussuria e cicoria
Stasera al ristorante sotto il tavolo di brina
Si muovono i miei piedi al suono dell’oboe

*


La espinilla del burro


Sentado a la mesa del restaurante
Llamo todo mi dolor
Del cuervo a la garrapata de la sal al salitre
Del cinco de a la dama abandonada por el armiño
Del tren herido en la nieva a las lunas rúnicas de tus uñas
¡Alhaja!
Bestia aturdida a la bendición del escupitajo
Clemente candelabro de siete brazos de la anestesia compasiva
Sentado en la mesta del restaurante
Conozco lo que queda de mi dolor
Entre la espinilla del burro y la lampara azul
Entre el anos y las guirnaldas de calendula
Entre lujuria y achicoria
Esta noche al restaurante bajo la mes de escarcha
Se menean mis pies al compás del oboe


*

Bastava dstrarsi un attimo


Basta distrarsi un attimo
Per ritrovarsi nella radura dei colchichi
Nel corteo della vergogna tra gli applausi dell’abiezione
Bastava distrarsi un attimo
Per ritrovarsi con le dita nei guanti di un altro
Per incespicare negli occhi del gatto che rotolavano sul parquet
Bastava distrarsi un attimo per abbandonare il nostro cuore sul barcone del macellaio
Tra l’ultimo grande iceberg e il prato di indivia
Bastava distrarsi un attimo per imboccare l’uscita di sicurezza
Per perdersi nei tuoi capelli
Per lasciarsi depilare della sabbia
Come un idolo rinnegato dai beduini
Per cadere addormentato tra un lupo e un cavolifore
Per mescolare picche con cuori
Bastava distrarsi un attimoo
Per smettere del tutto di nascere
O nascere solo a metá o nascere anche un po’ meno
Bastava distrarsi un attimo
Per cominciare a morire diligentemente l’immortalitá delle conchiglie
Bastava distrarsi un attimo per dimenticarsi del tempo
Para non essere piú in grado di venire alla luce
Bastava distrarsi un attimo
Per nutrirci di pómice
Per cadere nel pozzo scavato da noi stessi
Un attimo prima di distrarci un attimo.


*


Bastaba despistarse un instante

Bastaba despistarse un instante
Para encontrarse en el claro de los cólquicos
En la procesión de la vergüenza entre aplausos de abieción
Bastaba despistarse un instante
Para encontrarse con los dedos en los guantes de otro
Para tropezar con los ojos del gato rodando por la tarima
Bastaba despistarse un instante para olvidar el corazón sobre el mostrador del carnicero
Entre el último gran iceberg y el prado de endivia
Bastaba despistarse un instante para tomar la salida de seguridad
Para perderse en tu pelo
Para dejarse depilar por la arena
Como un ídolo renegado por los beduinos
Para dormirse entre un lobo y una coliflor
Para mezclar espadas con corazones
Bastaba despistarse un instante
Para cesar de nacer
Nacer sólo a mitad o menos
Bastaba despistarse un instante para empezar a morir diligentemente la inmortalidad de las conchas
Bastaba despistarse un instante para olvidar el tiempo
Para no saber más como darse a la luz
Bastaba despistarse un instante
Para alimentarse de pomex
Para caer en el pozo que  hemos cavados nosotros mismos
Un instante antes de despistarnos un instante.


*

Delle conchiglie madide di brina


Parlami ancora dei cipressi
Dell’isola delle campane parlami
Delle vaste correnti di polline
In cui nuotano tordi e stornelli
Aiutami ad alzare gli occhi
Verso il martirio verso l’unicorno
Parlami delle trombe in fondo al pantano
Fammi udire il loro suono fangoso
Che ritma le nozze delle carpe
Perché anche il mio corpo si riduca a bronzo
E il cuore distilli vino e screzi
Parlami della distesa dei suoni che si avvolgono ai cipressi
Parlami della tua isola ancora
Delle conchiglie madide di brina
Dei brividi di girasoli al risveglio dei tamburi
Parlami delle campane che minacciano la notte
Parlami dei loro
                    Mantelli
Dalle ali di corvo parla del loro suono
Alla mandorla dei miei occhi
Che lo oda con le mani
Avvinte alla tua chioma-


*

De las conchas empapadas de escarcha

Háblame háblame de los cipreses
De la islas de las campanas hablame
De las verdes corrientes del polen
Donde nadan mirlos y gorriones
Ayudarme a levantar los ojos
Hacia el martirio hacia el unicornio
Háblame de las trompetas
En el fondo de la marisma
Haz que escuche su sonido de barro
Que ritma las bodas de las carpas
Para que mi cuerpo se reduzca en bronce
Y el corazón destile vino y riñas
Háblame de la llanura de sonidos que envuelven los cipreses
Háblame de la isla háblame
De las conchas empapadas de escarcha
De los escalofríos de los girasoles al despertarse los tambores
Háblame de las campanas que amenazan la noche
Háblame de sus capas
De sus alas de cuervos habla de sus sonido
A la almendra de mis ojos.
Que oiga con mis manos
Atada a tu melena.


*


Altri giorni giustificheranno questi giorni
Altri corvi questi voli
Altri dolori queste candele
Le variazioni della presenza
La pressione
La libertá che si spegne tra i rami dei meli
Altri giorni giustificheranno troppi giorni
Dal vertice del volo al culmine del cipresso
Il richiamo dei corvi accende le lampade votive
Altri giorni consumeranno questo incenso
Per purificare voli e radiazioni
Per propiziare danze sotto la pioggia
Per festeggiare la mia assenza prolungata
Dalla notte dalla clemenza del tempo
Dal soggiorno dalla crepa nel muro a secco
Da cui fa capolino la lucertola dagli occhi di onice
Altri crepuscoli saranno l’ombra
Di questi giorni nuvole di corvi
Boschi di impiccati foreste di candelabri
Altre albe ancora saranno permesse ai sensi della legge vigente
Alla luce delle torce delle masnade
Nella fierezza dei tumulti ai trivi
È la tua speranza che conducono al rogo con la mia
O veleggiare sul mare seminale
Con occhi salsi guardare
Gli occhi del peccato.


*
Otros días juzgarán estos días
Otros cuervos estos vuelos
Otros dolores estas velas
Las variaciones de la presencia
La presión
La libertad que se apaga entre las ramas de los manzanos
Otros días juzgarán demasiados días
De la cúspide del vuelo a la cumbre del ciprés
El reclamo de los cuervos enciende  las lamparas consagradas
Otros días consumirán este incienso
Para purificar vuelos y radiaciones
Para propiciar danzas bajo la lluvia
Para celebrar mi larga ausencia
De la noche al tiempo clemente
Del salón a la grieta en la tapia
De la cual sale la lagartija ojos-de-ónice
Otros crepúsculos serán sombra
De estos días nubes de cuervo
Bosques de colgados forestas de candelabros
Otras albas aún se permitirán como previsto en la Ley orgánica
A la luz de las antorchas de las bandas
En la ferocidad de las trifulcas en los trivios
Es tu esperanza la que llevan a la hoguera junto a la mía
O abrir las velas en el mar seminal
Con ojos salados fijar
Los ojos del pecado.


*


Lasciar cadere

Lasciar cadere il fascio di vimini alla luce dell’ascia
Lasciar cadere la luna in fondo al pozzo
Lasciar cadere il denaro  tra le foglie del querceto novembrino
Lasciar cadere i limoni nella fontana
Lasciar cadere le chiacchiere nel cappello
Le botte sulle spalle del gobbo
Lasciar cadere l’invidia nelle ascelle
L’ombrello nella salamoia
La macchina da cucire nella sala operatoria
Lasciar cadere l’aspide nell’incensiere
Lasciar cadere il sálintro nel barolo
Lasciar cadere la pioggia sulle colline
Le tue parole negli otri vecchi
La fede nelle bisacce dell’oste malandrino
Lasciar cadere la speranza tra le pastiglie di benzodiacepina
L’occhio tra i ferri operatori
La disperazione  nell’assedio
Lasciar cadere
La dignitá nel coro delle stellle
Lasciar cadere gli angeli tra i larici
La coda della volpe nel corno inglese
Lasciar cadere l’amore sul tuo petto
La mente tra le barbabietole
Il sangue sui gigli ai piedi della Croce
Perché il discepolo lo raccolga in un ditale
Lasciar cadere il cadere tra le fragole
E poi, alla fine, lasciarsi cadere.

*

Dejar caer

Dejar caer el manojo de mimbre a la luz del hacha
Dejar caer la luna en el fondo del pozo
Dejar caer el dinero entre la hojas del encinar de noviembre
Dejar caer los limones en la fuente
Dejar caer las tertulias en el gorro
Los golpes en los hombros del jorobado
Dejar caer la envidia en las axilas
El paraguas en la salmuera
La máquina de coser en el quirófano
Dejar caer el áspide en el botafoguero
Deja caer el salitre en el Rioja
Dejar caer la lluvia en las colinas
Tus palabras en odres viejos
La fe en las alforjas del posadero granuja
La esperanza en las pastillas de benzodiacepina
El ojo en los utensilios quirúrgicos
La desesperación en el sitio
Dejar caer la dignidad en el coro de las estrellas
Los ángeles entre los
La cola de zorro en el corno inglés
Dejar caer el amor en tu regazo
La mente entre la remolacha
La sangre sobre los lirios a los pies de la cruz
Para que el discípulo la recoja en un dedal
Dejar caer el caer entre las fresas
Dejarse caere ¡Por fin!


*

Grandinava sui pianoforti abbandonati


Le mandrie d’onde si abbandonavano ai suoi piedi
Quando si alzava  per la benedizione
Nelle domeniche squisite di un’altra etá
Nel viale di lecci e mandarini
La luce dell’alba marina allora
Spalancava gli olivi come mazzi di carte
Seduceva gli sciami delle api
Orientava il volo delle vespe avventuriere
Il tempo era soltanto una scheggia dei suoi polsi
Le valli le orme dei sui piedi
Gli orsi danzavano intorno alle sue ginocchia
Agitando ghirlande di orologi
Con falce lunare vendemmiava
Grappoli di stelle
Ubriacava muratori e carpentieri
Lassú nei cantieri delle Grandi Muraglie
Grandinava sui pianoforti abbandonati nelle aie
Fino ai macelli risaliva il suo frondoso concerto
Tra lo strepito delle oche
Traendone accordi di rosari mattutini
I Vescovi si affacciano dai rosoni delle cattedrali
Proteggendo le tiare dalle folate di vento
Dalle loro labbra sgorgano come da mille fonti
Le benedizioni dell’agnello.


*

Granizaba sobre los pianos abandonados

Los rebaños de las olas se rendían a sus pies
Cuando se levantaba para bendecir
Los domingos exquisitos de otras edades
En la entrada de coscojas y mandarinas  
La luz del alba marina entonces
Abría los olivos como naipes
Seducía los enjambres de las abejas
Orientaba el vuelo de las avispas aventureras
El tiempo era un fragmento de sus muñecas
Los valles huellas de sus pies
Los osos danzan alrededor de sus rodillas
Sacudiendo guirnaldas de relojes
Con hoz lunar vendimiaba
Racimos de estrellas
Emborrachaba albañiles  y carpinteros
Arriba en los astilleros de las grandes murallas
Granizaba sobre los pianos abandonados en los cortijos
Hasta los mataderos subía su concierto de ramas
Entre el griterío de las ocas
Sacando acordes de rosarios matutinos
Los obispos se mostraban en los rosetones de las catedrales
Protegiendo las tiaras de los golpes de viento
De sus labios manan como de mil fuentes
Las bendiciones del cordero.


*

Il suono di questi monti


La nostra fedeltá al suono di questi monti
Era ferita ceppo amaro tannino
Il melo antico solo sul torrente
Il sapore acerbo delle sillabe del muschio
La lingua   degli avi     si faceva
Balbettio schiocco tosse
La lingua tramandata si faceva radice
Nel gelo del suolo avvinta al divenire
La nostra fedeltá al suono di questi monti
Era morire di incrinate parole
Clorofilla straziata lunare compassione
La nostra fedeltá al silenzio di questi monti
Era tutta la notte che avremmo potuto inghiottire
Singhiozzo strazio palizzata pero.


*

El sonido de estos montes

Nuestra fidelidad al sonido de estos montes
Era herida cepa amarga tanino
El manzano antiguo cerca de la rambla
Il sabor agrío de las sílabas del musgo
La lengua de los antepasados se volvía tartamudeo
En el hielo del suelo agarrados al devenir
Nuestra fidelidad al sonido de estos montes
Era morir de palabras agrietadas
Atormentada clorofila compasión lunar
Nuestra fidelidad al sonido de estos montes
Era toda la noche que habríamos podido tragar
Sollozo herida valla peral.


*


Era una lingua povera la nostra
Levigata come i sassi del torrente
Come le punte degli ontani d’inverno
Una lingua di rintocchi di battiti sordi
Una lingua di nebbia di incenso
Evocava lo scricchiolío dei passi sulla neve gelata
Era una lingua sottile appena delineata
Eppure giá satura i ricordi e profumi
Di un mare lontano accanto al precipizio
Era una lingua senza profumo senza delizia ne fragore
Abbandonata e persistente come il sapore di un frutto
Non piú coltivato da lungo tempo.

*

Era un pobre idioma el nuestro
Pulido como ls cantos rodados de la rambla
Como las cumbres de los alisos de invierno
Un idioma de redobles latidos sordos
Un idioma de niebla de incienso
Evocaba el chirriar cde los pasos en la noche helada
Era un idioma sutil apenas delineado
Sin embargo saturado de recuerdos y perfumes
De un mar lejano cerca del acantilado
Era un idioma sin perfumes sin delicias ni estruendo
Abandonado y persistente como el sabor de un fruto
Que nadie cultiva más desde muchos años.

*

Non lasciare che trascorrano i miei giorni
Senza che abbia toccato i tuoi capelli
Il Rosario che sanguina tra le tue dita
Le vespe che intessono la tua corona di meraviglie
Non lasciare che trascorrano i miei giorni
Senza che abbia potuto toccare il panno della tua veste
La neve che fiorisce ai tuoi valloni
La mandorla dei tuoi occhi che allatta
Corvi e merli
La mitezza dei tuoi alluci
Sul muschio sulla sabbia
Sulle strisce di carta di quotidiano
Che il vento disperde sul selciato
Lasciami accettare il tuo tepore
Quando le nuvole si disfano
In filamenti di cellule minacciose
E il cuore sta allo zenith del cipresso
Nella notte dell’Io
Lasciami che avvenga questo abbraccio
Che il mio rispetto non ti muti in vetta
O in bagliore o in sorriso
O corsa obliqua delle volpi
No! Mio tepore, spargi tu il mio sale
Lasciami la speranza delle bacche.


*


No dejes que mis días transcurran
Sin que haya acariciado tu pelo
El rosario sangrando entre tus dedos
La avispas que tejen tu corona de maravillas
No dejes que transcurran mis días
Sin que haya podido tocar el tejido de tu veste
La nieve que florece tus valles
La almendra de tu ojos que amamanta
Cuervos y mirlos
El sosiego de tus dedos gordos
En el musgo en la arena
En las rayas de papel de periódico
Que el viento dispersa en la calzada
Cuando las nubes se deshacen
En hileras de células amenazantes
Y el corazón marca el zenit del ciprés
En la noche del Yo
Déjame  que acontezca este abrazo
Que mi respeto no te vuelva cumbre
Relámpago o sonrisa
O carrera oblicua de los zorros
¡No! Mi tibieza esparza tu mi sal
Déjame la esperanzas de las bayas.

lunedì, maggio 08, 2017


DAVID MARIA TUROLDO

Signore, hai mai desiderato morire?
Sai cosa vuol dire: non farcela più,
perché il male è troppo grande, e amaro,
da renderci tanto infelici?
Dice un midrash antico che a volte
tu fai, a sera, delle nostre preghiere
un tappeto disteso nel cielo
e sopra tu pure ti prostri e preghi,
e questa sarebbe la tua preghiera:
- Di tanto male vi chiedo perdono, uomini…
Pensa al tuo popolo in mezzo al deserto:
- Fossimo morti per mano del Signore
in terra d’Egitto - per tua mano, Dio,
amante della vita!
E Giobbe a gridare:
- Perché le porte del grembo non chiuse?
Perché la pena ai miei occhi non nascose? -
Anche Cristo tentato di morire:
- Se tu sei il Figlio di Dio, buttati giù…-
anche lui sudando sangue, gridava:
- Padre, Padre, se è possibile …. -
Oh, le preghiere che salgono da tutti i deserti
dopo questo andare, e andare …
Come sono le preghiere di queste moltitudini
di braccianti, di deportati, di torturati, di uccisi?
Anche di te noi abbiamo pietà,
perché devi avere il cuore che scoppia,
e le notti che certo piangi per noi …
fino a farti pane, nostro cibo,
e a dirci: – Mangiate, alzatevi
che lungo è ancora il cammino. -
E noi andiamo ancora,
forti del tuo cibo;
solo perché tu ci ami
e noi ti amiamo,

giovedì, febbraio 23, 2017

Altre tre poesie di Pierre Reverdy

Oltre misura

Il mondo è la mia prigione
Se sono lontano da ció che amo
Non siete poi cossi lontane sbarre dell'orizzonte
L'amore la libertá nel cielo troppo vuoto
Sulla terra screpolata di doori
Un viso illumina e riscalda le cose dure
Che facevano parte della morte
A partire da questo volto
Da questi gesti da questa voce
Sono solo io che parlo
Il mio cuore che risuona e che batte
Uno schermo di fuoco tenero abat-jour
Tra i muri familiari della notte
Cerchio incantato di false solitudini
Fascio di riflessi luminosi
Rimpianti
Tutti questi brandelli di tempo cretpitano nel focolare
Ancora una mappa che i strappa
Un atto che manca all'appello
resta poco da prendere
In un moribondo

*

Sentiero seepeggiante

C'è un terribile grigio di polvere nel tempo
Un vento del sud dalle ali forti
Gli echi sordi dell'acqua nella sera che naufraga
E nella notte umida che sgorga dal tornante
Voci rugose che si lamentano
Un gusto di cenere sulla lingua
Un rumore d'rgano sui sentieri
La nave del cuore che becchegggia
Tutti i disastri del mestiere
Quando i fuochi del deserto si spengono uno a uno
Quando gli occhi sono madidi
Come ciuffi d'erba
Quando la rugiada scende a piedi nudi sulle foglie

Al mattino appena alzato
Qualcuno cerca
Un indirizzo perduto sul sentiero nascosto
Gli astri senza ruggine e i fiori precipitano
Attraverso i rami spezzati
E il ruscello scuro secca le sue labbra molli appena schiuse

Quando il passo del marciatore sul quadrante che conta
Regola il movimento e spinge l'orizzonte
Tutti i gridi sono passati tutti i tempi si incontrano
E io cammino verso il cielo con gli occhi nei raggi
C'è rumore per niente e nomi nella mia testa
Volti vivi
Tutto quello che è successo nel mondo
E questa festa
Dove ho perso tempo

Trad. genseki




mercoledì, febbraio 22, 2017

Tre poesie di Pierre Reverdy

La lampada

Il vento nero che torceva i tendaggi non poteva
Sollevare i fogli né spegnere la lampada.
Sembrava che qualcuno otesse entrare in una corrente di polvere.
Tra la porta aperta e la finestra
Che batte – nessuno
Eppure sulla tavola
Scossa un bagliore si agita in questa stanza vuota.


*

Il salvatore della realtá

Camminava su un piede senza sapere dove avrebbe posata l'altro, Alla svolta della strada il vento spazzava via la polvere e la sua bocca avida inghiottiva tutto lo spazio.
Si mise a correre sperando di prendere il volo da un momento all'altro, ma al bordo del ruscello il selciato era umido e le su braccia che battevano l'aria non poterono trattenerlo. Nella sua caduta comprese che era piú pesante del sogno che lo animava e amó, in seguito, il peso che l'aveva fatto cadere.

*

Il temporale

La finestra
Un buco vivo in cui urta il fulmine
Pieno di impazienza
Il rumore ha oltrepassato il silenzio
Non si capisce piú se è notte
La casa trema
Che mistero
Tacerá la voce che canta
Eravamo piú vicini
Di sotto
Chi cerca
Piú grande di quello che cerca
Tutto qua
Suolo
Sotto il chelo aperto
Scisso
Un fulmine a cui il fiato è restato

Sospeso.

Trad. genseki

lunedì, febbraio 20, 2017

Pierre Reverdy

Tardi nella vita

Sono duro
Sono tenero
Ho perduto il mio tempo
Sognando senza dormire
Dovunque son passato
Ho trovato la mia assenza
Non sono in nessun luogo
Eccettuato nel nulla
Al sommo delle mie viscere
Ove il fulmine torppo spesso ha colpito
È agganciato un cuore sul quale ogni parola
Ha intagliato il suo segno
E da cui la mia vita

Gocciola ad ogni scossa.

*

Trad. genseki

sabato, gennaio 14, 2017

René Char

Ne cherchez pas dans la montagne; mais si à quelque kilomètres de là, dans les gorges d'Oppedette vous rencontrez la foudre au visage d'écolier, alle à elle et souriez-lui car elle doit avoir faim, faim d'amitié

Affres, détonation, silence


*

Marta

Marta di cui questi vecchi muri non possono appropriars, fontana in cui si contempla la mia monarcia solitaria, come mai potrei dimenticarti per non dovermi ricordare di te; tu sei il presente che si accumula. Ci uniremo senza dover avvicinarci, prevederci, come due papaveri formano nell'amore un'anemone gigante. Non entreró nel tuo cuore per limitarne la memoria. Non tratteró la tua bocca per impedire che si schiuda sull'aria celeste e la sete di partenza. Voglio essere per te la libertá e il vento che varca la soglia di sempre prima che la notte divenga introvabile.

Penombra

Mi trovavo in una di quelle foreste dove il sole non penetra mai, ma di notte occhieggiano le stelle. Quel luogo aveva il permesso di esistere soltanto perché l'inquisizione degli Stati lo aveva trascurato.
Le servitú abbandonate sottolineano il loro disprezzo.
L'ossessione di castigare mi era stata ritirata ...


Le Thor

Nel sentiero delle erbe addormentate, ci stupivamo da bambini, che la notte si arrischiasse a passare, le vespe non andavano piú verso i romi e gli uccelli sui rami. L'acqua apriva agli ospiti del mattino la sua turbolenta immensitá. Erano filamenti d'ali, tentazioni di gridare, piroette tra luci e traspaenze. Le Thor si esaltava sulla lira delle sue pietre. Si scorgeva il Monte Ventoux, lo specchio delle aquile. Sul sentiero delle erbe addormentate, la chimera di un'etá perduta sorrideva alle nostre giovani lacrime.

Matita del prigioniero

Un amore la cui bocca è un mazzetto di nebbie
Si schiude e sparisce
Un cacciatore lo seguirá una sentinella verrá a saperlo.

Un uccello

Un uccello canta su un filo
La vita semplice, a fior di terra
Il nostro inferno si allegra
Poi il vento comincia a soffiare
Le stelle se ne accorgono
Ah! che folli a percorrere
Una fatalitá cosí profonda.

*

Trad, genseki

giovedì, gennaio 12, 2017

Benjamin Péret



Dormire, dormire nelle pietre

1

Dal corno del sonno agli occhi rivoltati dei sospiri
C’è posto per una cornamusa celeste
Da dove sgorga il suono fatale della reseda fiorita
Reseda, reseda se devi al quarzo i tuoi fiori
Perché ha messo alle tue radici una povere di sanguo e cervello
Che pepata ti acccarezza gli occhi
Ha pur messo la sua carezza marina sulla faccia inferiore dei toui petali
E l’acqua pura della sua testa nelle tue mani
Reseda reseda
Quando sará giunto il giorno delle biancehe arquate
Sentirai la testa inclinarsi come  un sole senza spessore
E il sangue delle tue vene si spargerá sullle stelle
Che ti risponderanno
Reseda reseda
I tuoi movimenti ribelli alle carezze del vento
Che passa presso di te come un minuto giá usato
Come un minuto liquido
I cui sguardi inutili si perdono nei pozzi
Dove vorresti vivere flessibile e pallido come un filo di 
Sorgente
Uccelli uccelli delle mie orecchie
Volate via
Volate via come una corrente d’aria
Verso lo spetrro di sale dove gemono le vostre piume
Tale piuma che geme aspetta soltanto la pioggia sottile per
Ritrovarvi
Tale piuma che impallidisce sará verde domani
Se l’uragano le svela il suo destino
E tale piuma che scompare come un A B C D
Si ritrova in primavera sulla testa dei cieli
Perché i cieli sono fatti delle vostre piume
Gocce di sangue d’acqua del gioiello piú antico delle donne
La polvere si annoiava nel deserto delle mani
Il cui superfluo deborda su seni pallidi

Usciti dallo specchio che nessuno scoprí
Perché parte e ritorna come una foglia
Perché è celeste
Perché è rosso
Secondo che il tuo sguardo si smarrisce come una bandiera
Secondo che la tua voce esplode come una aurora boreale
O scorre come le ciliege del tempo
Raccolte dagli oscuri viaggiatori del tuo sangue
Che schiuma lungo le tue anch
Onde fresche
Su labbra che bruciano al loro passaggio il mare e le isole

Circondate con le mani il corpo fragile dei venti
Il vento dell’errore e del sangue si gonfiano nei nostri corpi
Come una poesia di sale
E la reseda del cielo diventa anemica presso gli specchi
Perché si vede crescere come un torrente
Perché si vede oscillare sul suo supporto ossuto
Troppo simile all’angoscia d’una fiera
Perché si sente si sente la bocca e le orecchie di un dio
Di un dio salubre e forte che spazza via al mattino i germi spontanei
Delle mani stanche
Che dunque qui malgrado la madreperla delle arance
Osa contemplare dal piú profondo dei secoli
Il cavallo sereno dimentico dei crateri ove nacque l’orgoglio della
Sua razza
Che ci conduce all’alba
Che porta ninfee e seminatori di collier
Riflesso della pelle cosí dolce che vi ci si vorrebbe specchiare
Uccello delle luci non lo porta via
I granelli umidi fischiano nei loro rifugi
E le ombre appassite si nascondono sotto il muschio
Soffia o corno un azzurro cupo e verbale
La primavera è malata di un nuovo ciliegi
Di un ciliegio pieno di frutti sfavillanti
In cui affondano le ciglia di porcellana
Come uno sguardo in un getto d’acqua
Seduta spada seduti venti
Il mare scolora e domina il rosso
Il rosso del mio cuore è il rosso delle sue isole
Il vento che mi avvolge come un insetto
Il vento che mi salva da lontano
Il vento che ascolta il rumore dei suoi passi decrescere sulla mia ombra
Cosí pallido da sembrare un pesce volante

Hai sentito i capelli snodarsi come le lancette di una 
Pendola
E il soffio delle pietr attenuarsi per la paura che le mani
Non lo notino
Hai sentito la linfa sgorgare dagli alberi di paglia
E spargendosi sui fiumi
Coprirli di anatre
Le anatre degi astri non sono quelle di ma sorella
Perché ma sorella è nera come un’ostrica
E dalla sua voce escono talpe
E le talpe di mia sorella sanno tenere il loro segreto

I canestri e l’uva si incontrano su una strada 
Azzurra
Dall’urto scaturirá la grande mammella
Che ricopre gli orizzonti appassiti
E ci sará giustizia
Se la giustizia nasce dall’incontro tra l’uva e il cestino
Le tegole accarezzeranno i saggi affogati nel cemento
E le onde si rifiuteranno di attraversare il mare
Encora un’ora e gli scheletri si culleranno sulla corda
Delle maree
A condizione che i vetri perdano il loro splendore
A condizione che i vecchi si nascondano sotto le erbe
Chiocciole dei pendoli

Se l’amore nasce dalla proiezione del ribes nel becco 
Di un cigno
Mi piace
Perché il cigno del mio sangie ha mangiato tutto il ribes
Del mondo
Perché il mondo è soltanto ribes
E i ribes del mondo sgorgano dai suoi occhi
Come il sale degli alberi
Come il sale dagli alberi
Come l’acqua di mani sonore
Come le carezzze delle mosche di neve
Che nuotano la sera sui capelli disfaati che le implorano.

 Trad, genseki

lunedì, gennaio 09, 2017

Piedad Bonnet

Piedad Bonnet


Vincent Van Gogh contempla la notte


Un cavallo di ebano impiccato all sua morte

I suoi occhi di cristallo dietro la finestra
La sua testa tagliata coronata di stelle

E la lingua della paura
Le sua papille rosa la sua rugositá
Chi mastica e mastica dietro le mie orecchie?

Chi scalcia
E mi affonda nel pantano

Delle mie oscuritá
Dove balugina
Come un uccello in fiamme la coscienza?


Doppio

Mi guardo guardare

E il mio dentro è il mio fuori in questo carcere
In cui sempre mi trovo dietro a me
Con il mio fiato sulla mia nuca
Sussurandomi
Canzoncine all'orecchio come una madre un padre
Un monaco che obbliga un corvo a scendere
Con il becco insanguinato
Sulla pozza di luce della pupilla

Dell'altro
Che guarda
Che soffre.


Terrestre

Sognai un uccello impazzito
In una gabbia dello zoo
Mi risvegliai con la fronte piena di sangue
Chiamando mia madre
Chiedendole, in nome di Dio, latte caldo dai suoi seni
Per tornare a essere bambino.
Altri si destarono e gemettero e supplicarono come me
Nelle stanza vicine
Le mie braccia e il mio petto erano coperti di piume
Ma non vi era un cielo dove volare.


La madre è la grande notte


Qui il temo è legato con una camicia di forza
È vento sottomesso
Che scrive lo sstesso nome con un gesso sul muro.
Tutto sta qui dentro, in questo grande ventre
Pieno di uomini senza madre.
La madre è la grande notte. La madre è il nostro grido.
A madre è ogni dose di trifuoperazina
Che riempie di saliva le nostre labbra.
Quando accosto l'orecchio alle pareti
Perché voglio ascoltare il pianto di quelli che ancora mi amano
Solo odo il mio stridore. La mia oscura dissonanza
Il cuore della paura
Cantando la sua monotona litania.


.Fuso al nero

Quando avevo tre anni vidi mia madre illuminta
Ma credevio che bruciasse e piansi.
A sette anni dipinsi un toro dalle grandi corna e mi guardai nei suoi occhi
Soffrendo la sua ferita.
A quindici, con la faccia piena di grani, udii cantare in varie lingue la solitudine,
E le capivo tutte. L mia notte si popoló di incubi.
A diciotto
Sentii dire che stavo male di testa.
Mi afferrai con tutte le mie forze al legno marcio dell'infanzia
Mentre una radice cresceva tra le mie ciglia.
Un giorno le mie sorelle, spaventate, agitarono le loro ali di colombe
E lavarono il mio sangue con le loro lacrime.
Volli dire: vi amo. E gridare: padre, madre,
Ma qualcuno stava giá spegnendo le stelle.


Trad. Genseki

Da: http://www.otroparamo.com/cinco-poemas-ineditos-de-piedad-bonnett/




martedì, dicembre 27, 2016

Benjamin Péret



Sulla collina ispirata soltanto dalle labbra dipinte
Gli occhi bianchi si aprono alle luci della festa
La respirazione morirá presto di bella morte
Come se una mano si posasse sull’alto versante della collina
E gli uomini stiano gridand
Era dal cielo di Dio che cadevano parole assurde

Ora partiamo per la casa delle alghe
Dove vedremo gli elementi coperti dalle loro ombre
Avanzare come criminali
Per distruggere il paesaggio di domani
Amica mia cara paura

*

Battito di ciglia

Voli di pappagalli mi attravesano la testa
Quando ti vedo di profilo
El il cielo unto si stria di lampi azzurri
Che tracciano il tuo nome in tutti i sensi
Rosa sul capo una tribú negra smarrita su una scala
Ove i seni acuti delle donne guardano attraverso gli occhi
Degli uomini
Oggi guardo attraverso i tuoi capelli
Rosa opalina del mattino
E mi risveglio attraverso i tuoi occhi
Rosa d’armatura
E penso attraverso i tuoi seni di esplosione
Rosa di stagno verde di ranocchie
E dormo sul tuo ombelico di mar Caspio
Rosa di eglantina nello sciopero generale
E mi smarrisco nelle tue spalle di via lattea fecondata 
Comete
Rosa di gelsomino nella notte di bucato
Rosa di casa infestata
Rosa di foresta nera inondata di francobolli verdi e azzurri
Rosa di cervi volanti su di un terreno abbandonato ove si battono
I bambini
Rosa di fumo di sigaro
Rosa di spuma marina cristallizzata
Rosa



Aspettare

Illividido dalle grndi placche del tempo
L’uomo avanza come le vene del marmo che vogliono
Procurarsi degli occhiI
I un torrente dove le trote dalla testa di ventilatore
Trascinno carri pesanti di spuma di champagne
Ce nutrono i tuoi capelli di bastione
In cui la parietaria non osa avventurarsi
Per paura di essere divorata
Oltre la grande pianura gelata dove i dinosauri covano
Ancora
Le loro uova da cui non usciranno tulipani di ematite
Ma carovane di ricci dal ventre azzurro
Per la paura di essere ingoiati dalla fontana di fulmini marini
Generata dal tuo sguardo dove volano farfalle impalpabili
Di notte
Vestite di stazioni chiuse ove cerco il segnale di aperto
Senza trovare niente
Meno che ferri di cavallo congelati
Che saltano come un ombrello in un’orecchia
E anatre di ortica fresca
Che pesano come ostriche

Trad. genseki



sabato, dicembre 24, 2016

Alma


Tu alma vidrio detrás del cual veo la fiesta de las sábanas angélicas
Tu alma fuego que consume el romero soñador de inviernos
Tu alma río que bendice las algas celestes
Tu alma viento que sopla de las botellas de los antiguos misterios
Tu alma flor de sauce que emborracha la niebla
Que ríe traviesa al afán de los días
Que sube el monte de nácar con mil deseos a la espalda
Tu alma camelo enamorado de la nieve
Tu alma flecha que atraviesa el espejo y un chorro de noche sale a encoronar el
eucalipto del jardín
Tu alma perfume amargo de la subida a la luna de invierno
Tu alma mi hogar de trigo y de pájaros
Tu alma mi iris en el estuche de terciopelo
Tu alma zorro que salta de la higuera a la estrella de los pastores
Tu alma barro de mi costilla perdida
Guitarra de mis latidos raptado por las gacelas
Mi café de la mañana cuando las últimas estrellas asumen el color del anís
Tu alma trigo de mi olvido
Trepadora de mi memoria
Tu alma es mi cuerpo y el tuyo cubiertos de arena tibia


genseki

venerdì, dicembre 23, 2016

Benjamin Péret

Se il vento lo permette
La speranza saccheggerá le contrade sane
Prossime all'arcobaleno e al Polo della Seta
La contrada ove si concretizzano le visioni degli imenotteri
Dove la speranza degli uni anima l'ardore sessuale degli altri
Ove passo come un dolore periodico
Che stimola l'energia degli insetti dal guscio di vetro


O sospiri insetti d'avvenire
Vi attendo nella macchia che conoscete
Per rivelarvi segreti che vi faranno riflettere
Segreti cosí fluidi che vi scorreranno tra le dita
Come i minuti tra le cosce di una bella donna
E il sole degli insensati
Al sole
A mezzogiorno.


*

Allo

Mio castello in fiamme castello mio inondato dal vino del Reno
Mio ghetto d'iris neri mio occhio di cristallo
mia roccia che cade dal versante per schiacciare la guardi campestre
Mia chiocciola opalina mia zanzara d'aria
Mia coperta di uccelli del paradiso mia chioma di schiuma nera
Mia tomba scoppiata mia pioggia di rane rosse
Mia isola volante mio grappolo turchese
Mia collisione d'auto folli e prudenti mia aiuola selvaggia
Mio pistillo di soffione proiettato nel mio occhio
Mia cipolla di tulipano nel cervello
Mia gazzella smarrita in un cinema di periferia
Mia cassetta di sole frutto mio vulcanico
Riso mio dello stagno nascosto dove finiscono per annegare i profeti distratti
Mia inondazione di cassis mia farfalla di morilla
Mia cascata azzurra come un'onda di fondo che fa nascere la primavera
Mio revolver di corallo la cui bocca mi attira come l'occhio di un pozzo scintillante
Gelato come lo specchio dove tu contempli la fuga dei colibrí del tuo sguardo
Perduto in una vetrina di biancheria inquadrata di mummie

Ti amo.

Trad. genseki

sabato, dicembre 17, 2016

Poesie di genseki

La pioggia leggera che saliva dal mare
La frescura delle palme libere dalla verticalitá del sole
A piccoli passi sembrava godere
dell'umiditá del granito
scalza come la mattina tra le cortine di luce soffusa
dove un gatto dormirebbe volentieri
sudiciamente accoccolato
intorno a se stesso,
il giorno le veniva incontro dal mare
e lei andava incontro al giorno
con i capelli grigi con gli occhi socchiusi
nel fresco dell'alba appena dischiusa
nella stanchezza del vino mal bevuto
il viso accorto teso alla finestra
la brocca nel circolo rosso del lavabo
la pioggia leggera sui tavolini di zinco
Le pagine di un quotidiano abbandonato
Volteggiavano intorno al monumento delle fucine
come una minaccia di oblio.

I gerani sonnecchiavano nei loro vasi
al vertice di tutte quelle scale
e un grasso bruco bianco
strisciavdia sul viadotto tra i neon
sbrecciati (...)
ancora accesi, si stropicciava gli occhi
con i pugni profumati di finocchio
decisa a godere della pioggerella
Della grigia brezza marina
Della focaccia di ceci,
Di un'altra vita ove possibile
Con un altro vestito piú chiaro ancora.

Era risvegliarsi in un mondo di preghiera
un mondo di rose e di usignoli melodiosi
il mondo del rosario, delle vergini
avvolte nelle cappe screziate
con il figlio come il frutto maturo
di qualche albero araldico
il figlio che sarebbe apparso come un sole
nella cavitá del muro di recinzione
tra i rampicanti, il convolvolo
l'edera, la vite, il ribes
un soloe dolce dalla polpa succosa
mentre al limite del bosco,
le volpi maligne come rosse saette
di colpo restavano immoblili
rapprese in un ghigno minerale.

Lui? Lui, invece, era da tempo in cammino
seguiva il muro che separa il porto dalla cittá
un muro di piccoli mattoni rossi

sbrecciato lo appartava dal suo desiderio
limitava l'orizzonte fino a una ampiezza
Che potesse accettare, la vecchia casa
l'aveva perduta con le mimose, l'araucaria
Le spazzole di ricino tra le sbarre della cancellata
La sua stanza al piano terra
All'ombra del ficus, poteva udire il canto
della fontana, le ninfe di pietra grigia
la statua del cervo con le zampe spezzate
Entro pochi metri si sarebbe aperta
la piazza sul mare, il suolo reso lucido dalla pioggia
rifletteva le grandi catene di bronzo del Monumento
I voli sudici dei colombi, i margini delle nubi
sullo sfondo plumbeo del cielo
il mare poteva presentirlo, fiutarlo
come una casseruola di bronzo
verde specchio risonante mescolando odori,
nostalgie, abbandoni, pesava sulle sue palpebre
come pesa il sonno dell'infermo sul vespro ospitale

Anche la sua di preghiera sanguinava
Sanguinava come il nibbio impigliato en biancospino
Come il jacarandá quando tarda il tramonto di aprile
e l'odore dolce dei ceri inebria intorno i pochi
frettolosi passanti, no la sua preghiera non sgorgava
dal pozzo del cuore, non sorgeva dal turgore del bosco
era faticosa litania, monocorde nenia stentata
alla quale si agrappava attraversando a gran passi
i campi di ananas sollevando il volo dei merli
e le proteste delle cicale
pregava con testarda speranza, con vergogna,
con igoranza, con emozione, con commozione,
con disperazione, timidamente pregava,
con scetticismo, con fede, con convinzione,
si arrendeva alla preghiera come al meno peggio
incredulo della pioggerella, che aliviava l'arsura sua
l'arsura delle cose..

Peró, insomma, alla fine aveva fame, e la pioggia
fresca salina impregnava i tavolini di zinco
l'aria dei caffe aperti era densa di muffa e di dolore
oscura e opaca come un crimine attentamente occultato,
e poi come mangiare quando voleva essere degno dei gabbiani,
del salvatore crocifisso, del veliero gonfie le vele
della fresca speranza della virginitá?

O la parola fresca, la parola che naviga l'oceano
la sola parla di speranza che apre la scia e tra la schiuma
la seguono giocondi delfini, azzurrri figli delle libere equazioni
signori delle sfere e della fragilitá marina
dei coralli che sussurrano tra le alghe laboriose,
o la parola la sua parola la sola parola tante volte rinnegata
e ancora altrettante volte parola, parola maturata
Nel ventre della conchiglia, vergine dei pellicani
placton della saggezza dei cetacei.
O la parola morula, feto della parola, parola placenta
Parola ombelicale, amniotico battesimo di ogni grumo
Di affetto
poteva udirla ora nel ticchettio quasi impercettibile
di miliardi di salse goccioline di pioggia
parola per lui solo per i suoi due cuori
e per tutti gli affliiti afflitti di afflizione


Inno alla Madre sua

ora sei benedetta tra le spighe
e marci sulle orme dei santi
eucalipti dorati ti danno ombra
germoglio di madreperla
la tua anima bambina
tu agnella impigliata tra le spine
Il tuo antico dolore instancabile
cesella ora le gioie che ti adornano
e i raggi della luna ti incoronano
verdi scintille i tuoi occhi come foglie
é Sion la tua dimora, tra le tende
dei beduini che salgono al santuario
crescono i virgulti sui tuoi passi sciolti
e l'olio profumato ti impregna i capelli.
Sei una carezza ora alla mia fronte
Perdonami per quello che MI HAI FATTO.


*


La pioggia era solo una speranza
Il sorriso dell'uva un abbaglio
Le nuvole erano cosí basse
Che entravamo e uscivamo
Dalle loro spirali
Come i raggi visuali da uno specchio
Scomparsi i nostri corpi da tutte le foto
Restavano solo i paesaggi:
I Castelli della Loira, il Palazzo dei Papi
La Beauce, il Lago di Como,
A confermare quella sola domanda
Che evitavo di formulare.



Notte di falce notte di leone
Grandinava sugli ultimi tulipani
Dal balcone spargevi ricami di luna
Pallidi come il varco celeste
Il richiamo dolente della mia modestia
La traparenza oscena delle calzette
Tirate sui talloni
Il rigoroso rumore della grandine
Ruggiva sulla pergola in rovina
Autunnale era il panneggio
Della tua tunica del tuo mantello
Con quel fragore di onde
Di opale con i brividi
Degli scarabei smarriti
Angeli artropodi ricamavano il blasone
Delizia d'ombra del fico
Fratello delle alabarde.

*

Afferra il fumo stringilo forte
Non lasciare che scivoli via sul cielo
Ramificandosi insinuandosi
Dissipandosi come un soffio
Agguantalo prima che diventi latte
Cera molle osso poroso
Liberalo da ingiurie allora
Lascia che sia cavo
Come amplesso d'ombre
Nell'occhio del gigante
Del profeta

*

Com'è vuota l'ombra dei limone
Cava e fresca
Nella notte di dicembre
Notte caprina
Nel sibilo angustiato della luna
La madre fugge nel canneto
I colombi neri sono bianchi
I suoi piedi inverdiscono l'erba
Spremono il latte delle radici
L'ultimo rifugo è un battito
Che scava nella paura
L'utero della rinascita.

*

Tutti i tuoi sorrisi messi in fila
Non facevano un volo intero
Non abbozzzavano un balzo
La tua tenerezza era l'estremitá di una malinconia
Una campana smarrita nella neve
La neve che il suo passato rende eterna
Era l'affetto avvinto dalla perdita
La carezza del lutto
La candela di Natale sull'ombra stilizzata del terebinto
Sulla sua ragione spezzata
La tua fermezza un tabernacolo di ferite
Il tremore dell'olio nella lampada
Quando la sua luce si sintonizza con la tua stella.

*

La luna si dirama
Come un ontano
Sui frammenti del greto del torrente
Aspro l'alone della tua mano
Sulla pelle dell'acqua
Con l'altra mi benedici
Come una dispersione.


giovedì, dicembre 15, 2016

Maria la Profetessa



Il Filosofo Ares incontró Maria la Profetessa, la sorella di Mosé, e avvicinandola le disse: - O profetessa, ho sentito dire da molti che possiedi la capacitá di sbiancare la Pietra in un giorno soltanto. E Maria rispose: - Certo Aros anzi mi basta anche solo una frazione di un giorno. Aros disse: - O Maria, Signora, quando compirai l'opera che affermi di poter compiere? Come sbiancare e poi aggiunger negrezza? Disse Maria: - Molto si è detto di questo tra i pagani, forse non sai Aros che esiste un'acqua o una materia che sbianca Henragem? Allora Aros rispose dicendo: - È come dici, ma ci vuole molto tempo. Maria allora rispose: - Hermes in tutti i suoi libri ha detto che i Filosofi sbiancano la Pietra in un'ora.
Aros disse: - come è possibile qualche cosa di tanto eccellente? Maria rispose:
- Sembra anche piú eccellente a chi ignora.
Aros disse: - se si possiedono i quattro elementi, secondo Hermes, i loro fumi si possono completare, tingere, coagulare e ritenere in un giorno fino a consguire i fine che ci si è proposto.
Maria disse: - Oh Aros, se la tua mente e le tue conoscenze non fossero cosí solide non riusciresti ad ascoltare queste mie parole fino a quando il Signore non riempia il mio cuore con la grazia della Sua Divina Volontá, comunque devi prendere l'albume di Spagna, gomma bianca e gomma rossa, che è il Kibric dei Filosofi, e il loro sole e la maggior tintura e sposare gomma con gomma in un autentico matrimonio, rendile come una corrente d'acqua, vetrifica questa acqua che è stata lavorata e trattala per un intero giorno fuori dai due Lubechs, su corpo fisso fino a scioglierla per mezzo del segreto della natura nel calice della Filosofia. Hai inteso bene?
- Si Signora !
    Maria disse: - Trattieni il fumo e stai attento che non si disperda. Che la sua temperatura sia soave come il calore del sole nel mese di Giunio o di Luglio, resta presso il suo calice e trattalo con attenzione mentre vanno crescendo il nero, il rosso e il bianco, per tre ore in una giornata, e il fumo penetrerá nel corpo e lo spirito sará avvinto e saranno come latte, come cera, liquefacendosi e penetrando: questo è il segreto
Aros disse: - Io non diró che sará cosí per sempre.
Maria disse a Aros: - e vi sono cose ancora piú meravigliose rispetto a questo, come il fatto che non era conosciuto dagli antichi, che non apparve come cura o come arte medicinale e che consiste nel cogliere una libbra fresca dell'erba bianca, chiara e onesta che cresce sulle colline, e quasto è il vero corpo che non vola via dal fuoco.


On a Theme by Thomas merton

God's hands 
palpate darkness, the void 
that is Adam's inattention, 
his confused attention to everything, 
impassioned by multiplicity, his despair. 

Multiplicity, his despair; 
God's hands 
enacting blindness. Like a child 
at a barbaric fairgrounds -- 
noise, lights, the violent odors -- 
Adam fragments himself. The whirling rides! 

Fragmented Adam stares. 
God's hands 
unseen, the whirling rides 
dazzle, the lights blind him. Fragmented, 
he is not present to himself. God 
suffers the void that is his absence.

Denise Levertov